Parece que apenas era el 2014 en que recibimos la noticia de que Fray Joel Cosme Torres estaría al frente de nuestro Centro Escolar Aparicio, pensándolo bien fue una decisión acertada pues llegó para hacer el bien a la comunidad, que como gracia de Dios se manifiesta en el cuerpo místico de amor que emana del corazón del hombre solidario con el bienestar de su hermano. Pues a semejanza de San Francisco de Asís consideramos que su ideal ha sido seguir las huellas del Maestro y más si es un siervo de su viña bendita.
Gracias Fray Joel por esa entrega al servicio de la comunidad educativa del CEA, por la fraternidad demostrada a todos y cada uno quienes formamos parte de esta gran familia APARICIO, ver en el hermano el rostro de Dios mismo, es tener presente que cada acción impacta y transforma y deja huella ineludible en los corazones de quienes se cruzan en el camino de nuestras vidas. Y así pasa usted, dejando una profunda huella en quienes le conocemos y le estimamos y seguramente seguirá transformando vidas para el bien de la humanidad.
Que Dios Misericordioso le siga alimentando de esos frutos espirituales de la perfecta alegría y el optimismo, que sean sus medios para seguir haciendo el bien a su comunidad. Que María Santísima lo abrace en su bondad y amor maternal, que donde quiera que vaya el Espíritu Santo acompañe cada uno de sus pasos. Y que Nuestro Señor Jesucristo lo revista de su palabra para vivirla a semejanza de Él impregnándole de sabiduría para la nueva dirección que toma su vida y que con esa humildad que identificó a nuestro Santo de Asís, usted vuele tan alto que jamás olvide al más débil y necesitado.
Nosotros oraremos porque así sea. Con cariño fraternal le enviamos y un fuerte abrazo y un hasta pronto.
Paz y bien.